Luego de la investigación de campo hecha en varios centros asistenciales de Santa Marta, el Instituto Nacional de Salud (INS) confirmó que el brote que se registró en la comunidad Kogui de Dibulla, La Guajira, fue consecuencia de la tosferina o Bordetella Pertussis, una infección contagiosa que genera afectaciones en la respiración y tos.
Además de eso, se pudo identificar que 12 de los 17 menores de edad, miembros de la comunidad indígena, están en estado de desnutrición aguda y que cinco de ellos permanecen en la Unidad de Cuidados Intensivos.
A través de un comunicado, el INS señaló que “la causa del brote no se debió a un virus respiratorio desconocido o atípico. Las muestras analizadas por el Laboratorio Nacional de Referencia confirmaron la detección por PCR de la Bordetella Pertussis o también conocida como tosferina. Todos actualmente en tratamiento con antibiótico, con buena respuesta y evolución”.
Además, hizo un llamado a las autoridades de salud debido a que ninguno de los niños tiene esquema de vacunación contra la tosferina. “Es lamentable que los niños mueran y enfermen a causa de esta enfermedad. Secretarías, EAPB y padres o adultos acudientes deben comprometerse con la vacunación de los niños menores de cinco años”, indicaron en dicho comunicado.
Por lo anterior, el organismo de salud insistió en que es necesario que se revisen los procesos y sistemas de vacunación en territorios indígenas, con el fin de evitar casos lamentables como los denunciados por el líder de la EPS Gonawindua, Alfonso Torres quién informó sobre las muertes de niños a causa de un brote desconocido para ellos.
Entre tanto, Deimer Marín, secretario de salud de Santa Marta informó que los niños están siendo atendidos en la clínica El Prado y el hospital Julio Méndez Barreneche.