Waldina Muñoz, junto a 21 mujeres del Resguardo indígena Piedra Sagrada Los Pastos de Villagarzón, en Putumayo, integran a las Guardianas del Agua, porque desde el seno de su madre se han preocupado por la conservación de su territorio. Hoy, gracias a la Asociación de Mujeres Tejedoras de Vida del departamento este colectivo realiza acciones por la protección de las fuentes hídricas de su región.
Hace dos años 22 mujeres indígenas empezaron a trabajar en proyectos por recuperar su identidad cultural e iniciaron fortaleciendo el traje tradicional ancestral. “Nos unimos 22 mujeres en la elaboración de traje tradicional con esfuerzos propios, con trabajo, con capacitaciones, con mingas de pensamiento, un proceso muy amplio, muy dispendioso, pero logramos unirnos”, afirmó Waldina Muñoz.
Este proceso permitió que el gobernador indígena de turno permitiera por primera vez la creación de un grupo de mujeres dentro del mismo resguardo. Algo que no se había hecho anteriormente, sin embargo, se abrió el espacio para que las mujeres pudieran expresar lo que sentían, para fortalecer la identidad cultural, siempre respetando el pensamiento y a las autoridades indígenas.
Desde ahí ellas pudieron impulsarse y avanzar en proyectos como la conservación del agua y la protección de las fuentes hídricas. La Asociación de Mujeres Tejedoras de Vida del Putumayo realizó una invitación en el año 2020 para capacitar a las mujeres del resguardo, donde participaron tres de ellas, entre las que se encontraba Waldina Muñoz.
“Fortalecieron mucho más este ejercicio por medio de REDD+, un proyecto que nos regaló herramientas importantes, como leyes y decretos, que son lo nos aportan para la defensa de nuestras fuentes hídricas y de nuestros espacios”, afirmó Waldina sobre la capacitación que recibieron para adelantar el proceso de Guardianas del Agua.
El 20 de febrero de este año se reunieron las 22 mujeres indígenas y junto a la participación de integrantes del resguardo trabajaron para realizar una ‘Sembraton’, con el fin de reforestar la quebrada Juansoko, que pertenece al Resguardo Indígena Piedra Sagrada Los Pastos, en Villagarzón.
“La intención es continuar fortaleciendo este ejercicio como mujeres guardianas del agua dentro del resguardo y conservarnos nosotros como grupo”, afirma Waldina.
Esta mujer junto a Guardianas del Agua también espera concienciar a los niños y niñas del territorio, para que sean ellos los que cuiden de la naturaleza y de lo que se abastecen (agua, frutas, vegetales y productos que da la tierra).
Las Guardianas del Agua en Putumayo son una iniciativa de Mujeres Tejedoras de Vida que buscan oportunidades de intervención e incidencia en el cambio climático, ordenamiento territorial y la protección de los recursos naturales de la región, es por eso que en cada uno de los municipios de Putumayo se busca que existan lideresas que se conviertan en Guardianas del Agua.