Tras la imputación de cargos que hizo la Fiscalía contra los siete soldados involucrados en el caso de una niña indígena de 12 años en Risaralda que fue violentada, la vicepresidente Marta Lucía Ramírez aseguró que, aunque respeta la autonomía de las ramas del poder, está en desacuerdo con esa imputación.
“Aquí hay una violación, aquí no se trata de un abuso ni de un acceso, esto es una violación. Y si no llamamos las cosas por su nombre después vamos a ver al juez de garantías teniendo un tratamiento benigno que no puede haber en este caso”, dijo la alta funcionaria.
La vicepresidenta agregó que el Gobierno seguirá acompañando a la menor y a su familia durante todo el proceso.
“Este es un caso que merece la condena social, debemos actuar con celeridad y coherencia, para defender los derechos de las niñas, niños, adolescentes y mujeres. Es el momento de aplicar la cadena perpetua”, afirmó Ramírez.
Durante la audiencia, a los militares implicados en este caso se les imputó el delito de acceso carnal abusivo con menor de 14 años. El fiscal General, Francisco Barbosa, informó que los procesados podrían pagar una pena de 16 a 30 años de prisión.