La Procuraduría General de la Nación decidió, este sábado, abrir una indagación preliminar contra los policías que capturaron y custodiaron al empresario Enrique Vives, procesado por arrollar a siete personas, seis de las cuales murieron.
De acuerdo con el ente de control, con esta indagación se busca determinar “la existencia de presuntas faltas disciplinarias relacionadas supuestas irregularidades en el procedimiento realizado por los miembros de la Policía Nacional al momento de la captura de Vives Caballero y su disposición ante el juez de conocimiento”.
Esto se desprende de los hechos ocurridos la madrugada del pasado 13 de septiembre en la vía Santa Marta-Gaira. Vives Caballero, en estado de alicoramiento y manejando con exceso de velocidad, atropelló con su vehículo a un grupo de jóvenes entre los 15 y 19 años.
Tras el accidente, Vives apareció en la clínica Perfect Body, donde fue capturado y permaneció en custodia policial hasta la tarde del miércoles, cuando por su cuenta, y en compañía de los agentes policiales, salió y se internó en un centro psiquiátrico, pese a que la jueza Olmis Cotes había ordenado que permaneciera allí.
“La Procuraduría ordenó la práctica de pruebas con la finalidad de identificar a los presuntos responsables, verificar la ocurrencia de la conducta, determinar si es constitutiva en falta disciplinaria”, informó el ente de control en un comunicado.
Vives Caballero compareció ante la jueza Olmos este viernes en audiencia que se extendió hasta la una de la madrugada. La togada decidió suspender la diligencia y retomarla este sábado a partir de las 9 de la mañana para determinar la medida de aseguramiento.
Al empresario le fue imputado por parte de la Fiscalía el delito de homicidio en concurso homogéneo y sucesivo en la modalidad de dolo eventual a título de autor material.
Vives no se allanó y propuso una indemnización a las familias de las víctimas.
Fiscalía pide cárcel para Vives
La Fiscalía solicitó ante la juez Primera Penal Municipal de Santa Marta, enviar a la cárcel a Enrique Rafael Vives Caballero, por atropellar a seis jóvenes en el sector de Gaira el pasado 13 de septiembre, cuando presuntamente manejaba borracho.
Esta solicitud la hizo la Fiscalía, argumentando que Vives Caballero debe ir a la cárcel porque representa un peligro para la comunidad y un riesgo de no comparecencia.
Lo que se vio reflejado, según la Fiscalía, en los hechos que impidieron la continuación de las audiencias preliminares: “pasamos sufriendo para poder continuar las medidas de imputación y medida de aseguramiento, porque Vives fue recluido en un centro transitorio y sin autorización de la Fiscalía fue trasladado a la Clínica Perfect Body, donde tuvimos que trasladarnos hasta allá”, dijo el ente acusador.
Añadió que al llegar a ese lugar se encontraron con que Vives había sido trasladado a otra clínica psiquiátrica sin informar al ente acusador ni a la juez, y hasta hoy se pudo adelantar la imputación. “Lo que refleja una obstrucción a que se realizarán las diligencias”.
En este hecho fallecieron Rafaela Petit, María Camila Martínez, Laura Valentina de Lima, Juan Diego Alzate y los hermanos Camila y Lenoir Romero y resultó gravemente herido un menor de edad.
Agregó el fiscal que Vives Caballero ha recibido varios comparendos de tránsito por conducir a alta velocidad.
Por estos hechos Vives Caballero fue imputado por el delito de homicidio en la modalidad de dolo eventual.
Esta petición fue compartida por los abogados de víctimas y la Procuraduría.