Por: Ingrid García. Radio Nacional de Colombia Nariño.
Esta megaobra hace parte de la iniciativa del Gobierno Nacional de Proyectos de Cuarta Generación 4G, que facilitarán desplazamientos de tráfico de larga distancia con velocidades de diseño de 60 km por hora, y potenciará la competitividad de la economía nacional y la conectividad de la región.
El proyecto que tiene actualmente un porcentaje de ejecución del 21.13% y que tendrá un costo total de 2.3 billones de pesos, es ejecutado por la concesionaria Vial Unión del Sur y sus asociados Sacyr Concesiones Colombia y Herdoiza Crespo Construcciones. Fue adjudicado en el año 2015.
Según información suministrada por Germán de la Torre, gerente de la concesionaria, el proyecto prevé una inversión en infraestructura que superará los 1.8 billones de pesos y el restante será asignado para la operación y mantenimiento de la concesión durante 25 años.
Características del proyecto
El proyecto contempla la construcción en doble calzada de 78 km entre Rumichaca y Catambuco, y 5 km de mejoramiento entre Catambuco y el sector de Chapal en Pasto.
En diálogo con Radio Nacional de Colombia, el ingeniero Julián Barrera, director técnico de la construcción, describió los componentes que tiene la obra como son: 6 puentes peatonales, 9 puentes vehiculares y 17 retornos.
El gerente de la concesionaria Vial Unión del Sur indicó además que la obra cuenta con un laboratorio de materiales.
“El laboratorio se encarga de verificar materiales, tanto en fuente, como durante su uso y colocación en el producto terminado. Realizamos pruebas y ensayos a materiales para terraplén, suelos, materiales para los concretos (piedra, arena y el agua), y los materiales áridos que se utilizan para nuestros asfaltos. Contamos con equipos para las pruebas de resistencia en concretos, para validar desgastes en nuestros materiales, y para verificar estabilidad, flujo y vacíos en nuestras mezclas asfálticas”, dijo.
Permisos ambientales para la ejecución de la obra
Es importante mencionar que para ejecución de la obra, la Agencia Nacional de Licencias Ambientales - ANLA otorgó a la concesionaria el permiso para el tramo entre San Juan (Ipiales) y Pilcuán (Imues), tras cumplir con las condiciones técnicas y de calidad para el desarrollo de la misma.
“La Agencia Nacional de Licencias Ambientales -ANLA- mediante resolución N° 2022 del 13 de noviembre de 2018, validó lo dicho en el Diagnóstico Ambiental de Alternativas realizado en el 2017, en cuanto a que el trazado escogido para el desarrollo del proyecto vial Rumichaca – Pasto es el más idóneo ambientalmente, dadas las características de la región”, puntualizó Germán de la Torre, gerente de la concesionaria Vial Unión del Sur.
Dificultades en la ejecución
La principal dificultad afrontada en el desarrollo de la obra es la concertación con una de las siete comunidades indígenas asentadas a lo largo de la intervención.
German de la Torre, gerente de la concesionaria aseguró que “actualmente ya hemos logrado Acuerdos de Consulta Previa con seis de las siete comunidades indígenas que se encuentran a lo largo del área de influencia. Acuerdos que se han venido cumpliendo, desarrollando proyectos productivos, de mejoramiento de vivienda, apoyo a sus tradiciones, costumbres y cosmología; fortaleciendo la confianza y convivencia entre estas comunidades y el proyecto vial”.
“Nosotros como concesionaria continuamos abiertos al diálogo, de la mano de la Agencia Nacional de Infraestructura –ANI y el Ministerio de Transporte”.
Las dificultades se presentan en el tramo entre San Juan (Ipiales) hasta Rumichaca y su principal causante es la concertación con el Resguardo Indígena de Ipiales, sobre la localización de un peaje.
Tampoco ha sido posible que la concesionaria adelante el estudio para el desarrollo de la licencia ambiental, que puedan ingresar al territorio para hacer estudios y diseños y llegar a acuerdos sobre los impactos generados por el proyecto y las medidas de manejo y mitigación, situación que mantiene las obras suspendidas en mencionado tramo.
Ante este panorama, el Comité Intergremial de Nariño ha sentado su posición de descontento y en reiteradas ocasiones ha hecho un llamado a la concertación inmediata, dada la importancia que representa para el desarrollo y la conectividad de Nariño, la culminación completa de una obra de esta magnitud.
Fidel Díaz Teran, presidente ejecutivo de la Cámara de Comercio de Pasto, indicó que “la gran dificultad es que no se ha podido lograr un acuerdo con la comunidad indígena de Ipiales, Pero creo que los nariñenses debemos ser conscientes que este es un proyecto importante y estratégico no solo para Nariño, sino para el país”.
“Lo primero es que se debe luchar para que el proyecto se realice en toda su magnitud y posteriormente se puede discutir la ubicación del peaje, pero ese no debe ser el impedimento para que la obra no se ejecute completamente”, afirmó Fidel Díaz Teran, dirigente gremial.
Por su parte, el exgobernador del pueblo de los Pastos, Silvio Lagos, aseguró que en ningún momento se oponen al desarrollo de la obra, pero en el proceso de consulta previa debe existir un acuerdo que beneficie tanto a las comunidades indígenas, como al resto de la población.
“Las comunidades indígenas no nos hemos opuesto al desarrollo de nuestro país, pero sí exigimos que en la consulta previa haya una concertación donde queden satisfechos el Gobierno Nacional, las comunidades indígenas y la constructora. Los gobernadores actuales están adelantando las negociaciones pertinentes, ellos nunca han cerrado las puertas al diálogo, pero éste debe ser para beneficio de todos y debe reflejar el apoyo a las comunidades indígenas”.
Otra de las dificultades que aún persisten, pero que no afecta directamente el desarrollo de la obra, es el descontento que existe por parte de la comunidad del sector de El Pedregal, municipio de Imués, debido a la disminución considerable en las ventas de comidas que tradicionalmente se ubican en este sector.
Gloria Nandar, vendedora de comidas dijo a Radio Nacional de Colombia que “el cierre nocturno y los pasos restringidos de la vía han afectado nuestro trabajo, la gente ya no visita el lugar, el polvo nos afecta los alimentos y hemos tenido que reducir incluso el personal pues ya no es sostenible debido a la baja en las ventas”.
Importancia de la obra internacionalmente
El presidente de la Comisión Regional de Competitividad de Nariño, Geovanny Carvajal, ha sido consultado en varias oportunidades por Radio Nacional de Colombia, sobre la importancia de esta obra y en reiteradas oportunidades ha manifestado:
“La doble calzada Rumichaca – Pasto es un proyecto que traerá progreso y desarrollo para todos, pues permitirá la apertura comercial, la llegada de nuevos inversionistas a la región y con ello la dinámica económica y comercial no solo a nivel nacional, sino internacional”, expresó.
Por su parte, el gerente de la concesionaria Vial Unión del Sur, Germán de la Torre, indicó que la ejecución de la doble calzada ha beneficiado a las comunidades del área de influencia del proyecto, con empleo y apoyo a sus iniciativas productivas:
“Tenemos vinculadas al proyecto 3.524 personas (mayo de 2019). Actualmente, más del 73% de la mano de obra es nariñense”.
Agregó que “el programa de voluntariado Construimos Futuro busca llevar bienestar a las comunidades del área de influencia de la doble calzada, con actividades como: embellecimiento y adecuaciones de escuelas en los municipios de Yacuanquer y El Contadero, donaciones de equipos para deportistas de la región, entre otras”.
Fechas de entrega
De acuerdo con la información suministrada por la concesionaria, la doble calzada debe entregarse operando según el contrato de concesión en el 2021, por lo que esperan entregar el proyecto por tramos llamados “Unidades Funcionales (UF)”, la primera que va desde Tangua hasta Pasto, pretende ser entregada en el primer semestre del año 2020.