La Alcaldía de Santa Marta, en cumplimiento de la Ley 2138 de 2021, ha puesto en marcha un ambicioso proceso de sustitución de vehículos de tracción animal con el objetivo de mejorar las condiciones laborales de los trabajadores que dependen de este medio de transporte y garantizar el bienestar de los equinos. Esta iniciativa busca modernizar el sistema de movilidad, generar nuevas oportunidades económicas para los beneficiarios y promover la protección y dignidad de los animales involucrados.
En una reunión con los gremios de carromuleros del Distrito, el alcalde Carlos Pinedo Cuello ratificó el compromiso de su administración con la implementación efectiva de este proceso de transición. Durante el encuentro, se acordaron lineamientos para llevar a cabo la sustitución de estos vehículos de manera ordenada y progresiva, asegurando que los trabajadores accedan a alternativas de transporte más eficientes y sostenibles.
El primer paso en este proceso será la actualización del censo de propietarios de vehículos de tracción animal, tarea que se llevará a cabo en un plazo de diez meses. Esta base de datos permitirá determinar con precisión el número de beneficiarios y sus condiciones actuales. Los resultados del censo serán remitidos al Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), garantizando así un proceso transparente y basado en información real.
Con estos datos, la administración distrital procederá a la sustitución de los vehículos de tracción animal por automotores más modernos, financiados a través de diversas fuentes, incluyendo recursos de regalías, donaciones y cooperación nacional e internacional. Se espera que la entrega de los nuevos vehículos comience antes del 29 de julio de este año y se desarrolle de manera progresiva para facilitar la adaptación de los beneficiarios.
Para acceder a los nuevos vehículos, los beneficiarios deberán cumplir con ciertos requisitos, entre ellos la entrega de sus carretas para chatarrización, con el fin de evitar que estos vehículos vuelvan a circular y garantizar el éxito de la transición. Además, deberán comprometerse a no vender ni transferir los nuevos medios de transporte durante un período mínimo de cinco años.
Las autoridades también han diseñado un plan integral para fortalecer las oportunidades económicas de los trabajadores afectados. Como parte de esta estrategia, serán incluidos en los Planes de Gestión Integral de Residuos Sólidos, facilitando su vinculación al sector del reciclaje y promoviendo alternativas económicas sostenibles que les permitan mejorar sus ingresos y calidad de vida.
Patricia Caicedo Lafaurie, secretaria de Planeación Distrital, destacó la importancia de este proyecto como una política pública con impacto social y ambiental. “La meta no es solo reemplazar los vehículos de tracción animal, sino garantizar la inclusión de esta población en programas que les brinden estabilidad económica. Estamos dando un paso hacia la movilidad sostenible y la dignificación del trabajo de los carromuleros, al tiempo que protegemos la vida y el bienestar de los caballos”, señaló la funcionaria.
Con esta iniciativa, Santa Marta avanza en la construcción de una ciudad más incluyente, sostenible y comprometida con la protección de los animales y el bienestar de sus habitantes. Se espera que este programa sirva como modelo para otras regiones del país que buscan implementar soluciones similares en favor del desarrollo social y ambiental.