Cineasta Ciro Guerra es acusado por ocho mujeres de acoso sexual
A través de un artículo publicado en la revista digital Volcánicas, ocho mujeres denunciaron episodios de acoso y abuso sexual sufrido a manos del reconocido cineasta colombiano Ciro guerra, director de la película nominada al Óscar, ‘El abrazo de la serpiente’. El acusado negó los hechos y advirtió que recurriría a acciones penales.
En el reportaje se recogen los testimonios de las ocho mujeres relatando los episodios que vivieron con el director de cine entre los años 2013 y 2019, en tres ciudades colombianas y tres internacionales, en eventos como el Festival Internacional de Cine de Cartagena, el Festival de Cannes y el Colombian Film Festival. Y el testimonio de testigos que corroboran los hechos.
En algunos de esos relatos las víctimas cuentan cómo en medio de fiestas Guerra se acercaba con conversaciones obscenas, intentando tocarlas y besarlas, pese a su reiterado “no”. Los testimonios -dicen las periodistas en el artículo- están soportados por conversaciones que tuvieron con las implicadas por WhatsApp, y comparten ‘pantallazos’ de algunas de ellas.
Las historias, en general, “siguen un patrón que incluye incómodas conversaciones de índole sexual, invitaciones a su hotel o apartamento, el uso de la fuerza para tocarlas sexualmente, besarlas (...) También muestran cómo Guerra usa su prestigio profesional para intimidar y establecer relaciones de poder abusivas frente a las agredidas”, describe el artículo.
Luego de la publicación del artículo este miércoles, Ciro Guerra, por medio de un video, negó las acciones delictivas de las que se le acusa, señala que todo hace parte de un montaje en su contra y anuncia acciones penales para “limpiar mi nombre”. Ante las denuncias, el cineasta, que se encuentra en este momento en México dirigiendo una serie histórica sobre la pandemia del coronavirus, dijo:
“Ante la publicación del día de hoy por parte de la Revista Volcánicas, en la que se hacen graves acusaciones anónimas en mi contra, me permito manifestar que no he cometido ninguna de las faltas de las que se me señala, y que no tengo otra opción para limpiar mi nombre, que recurrir a las vías legales. Ofrezco disculpas a todos los que se vean afectados, a todos los que han tenido que leer estas horrorosas, mentirosas y malintencionadas palabras, y agradezco a todas las personas que me han brindado su apoyo y acompañamiento. Les pido que por favor antes de juzgar, todos esperemos que la justicia evalúe y arroje total claridad de los supuestos hechos mencionados”.
En la revista advierten que las denunciantes no tienen intención de interponer una denuncia penal porque temen pasar un proceso de revictimización en el sistema judicial y el escarnio público.
