El presidente republicano Donald Trump y el candidato demócrata Joe Biden se enfrentaron con polémicos intercambios durante en el primer debate por la Presidencia de Estados Unidos, cargo que se disputarán en las elecciones del próximo 3 de noviembre.
Los aspirantes a la Casa Blanca debatieron durante una hora y media sobre seis temas en los que se presentaron más enfrentamientos que propuestas. Los ejes de discusión fueron: la Corte Suprema de Justicia, la pandemia de Covid-19, la economía estadounidense, la violencia racial, el cambio climático y la integridad en las elecciones.
Aunque el moderador del debate, Chris Wallace, hizo un esfuerzo por calmar los ánimos, el encuentro estuvo marcado por constantes insultos e interrupciones de ambos candidatos.
Mauricio Jaramillo, profesor de la facultad de Ciencia Política de la Universidad del Rosario explicó en Radio Nacional de Colombia que lo que ocurrió ya se venía anticipando, especialmente en lo referente al comportamiento de Donald Trump:
“Sabíamos que nos íbamos a encontrar con un Donald Trump que iba a ser muy agresivo, creo que nadie se imaginó que llegara hasta esos niveles de insolencia e irrespeto por las mínimas normas que deben guiar un debate” señaló Jaramillo.
Algunas de las acusaciones incluyeron la supuesta evasión fiscal de Donald Trump y la incriminación contra el hijo de Joe Biden por corrupción, lo cual aumentó el tono combativo entre los contendores y propició un ambiente de tensiones en el que no se evidenciaron propuestas sobre los temas planteados.
Respecto al encuentro, el profesor Mauricio Jaramillo aseguró que la irreverencia atentó contra la claridad de ideas y que los insultos no permitieron la profundidad en losejes centrales de discusión:
“Se vio un afán muy grande de Donald Trump por un lado de marcar su territorio, y del otro lado, Joe Biden de poner en evidencia lo que él considera es la incompetencia de Donald Trump”, sostuvo.
Según la opinión del experto, el mandatario Donald Trump pudo haber perdido el debate al usar todas sus “naves de guerra muy rápido”, lo cual desgastó sus argumentos. Por otra parte, le abona a Joe Biden haberse contenido un poco más que su rival y haber recurrido al conocimiento en vez de la emoción durante la mayor parte del debate.
“Lo peor que le puede pasar a Donald Trump es asumir un debate en el que haya reglas y donde tenga que respetar los tiempos, porque a él le conviene la polémica y la insolencia”, aseguró el académico.
Los aspirantes a la Presidencia de Estados Unidos se encontrarán nuevamente en dos debates 15 y el 22 de octubre, en los que se espera que continúe el pulso por llegar a la Casa Blanca.