En un nuevo resultado de la intervención al cementerio central de Neiva, la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas encontró y recuperó los cuerpos de doce personas que murieron en hechos asociados al conflicto armado en el sur del país, y que fueron sepultadas sin identificar en fosas comunes en este campo santo.
Diego Sevilla Cortés, coordinador de la Unidad de Búsqueda para el Huila, señaló que la investigación humanitaria determinó que “los cuerpos localizados y recuperados podrían corresponder a personas que perdieron la vida en hostilidades” en el marco del conflicto armado. Estos hechos podrían haber sucedido en “municipios como Planadas, en el departamento del Tolima; Campoalegre, Algeciras y Colombia, en el Huila, y San Vicente del Caguán, en Caquetá”, apuntó Sevilla.
El funcionario explicó que “por el estado en el que se encontraban, nueve de los 12 cuerpos fueron entregados al Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses para avanzar en su proceso de identificación, mientras que los tres restantes quedaron bajo custodia de la Unidad de Búsqueda y esperamos que en las próximas semanas puedan ser verificados”.
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Tanto las tareas de búsqueda como de identificación cuentan con el apoyo y participación activa de familias buscadoras y representantes de organizaciones sociales e instituciones públicas, que intentan dar respuesta a años y décadas de búsqueda de personas dadas por desaparecidas y de víctimas del conflicto armado.
La intervención en el cementerio central de Neiva inició en febrero del año pasado. Desde entonces, han sido recuperados los cuerpos de 59 personas.
“Esperamos que en este año 2025 podamos realizar otras fases de intervenciones en el cementerio, e intervenir algunas de las fosas que aún nos hacen falta y poder continuar con la intervención al Monumento Catorce”, señaló Sevilla Cortés.
Este sector del cementerio puede contener los restos humanos de víctimas del conflicto armado, sepultados entre los años 2001 y 2012, de departamentos como Caquetá, Tolima, Cauca y Huila.
Por esta razón, la Jurisdicción Especial para la Paz impuso una medida que busca proteger los sitios en los cuales se considera que hay más cuerpos de víctimas sepultadas sin identificar.