En las últimas horas fue capturada una sexta persona como presunta partícipe del atentado que cegó la vida de los Intendentes de la Policía Nacional William Bareño y David Reyes, que se desempeñaban como técnicos en explosivos, el pasado 14 de diciembre en el Aeropuerto Camilo Daza, en Cúcutá
El ministro de Defensa, Diego Molano dijo que la Policía Nacional, en coordinación con la Fiscalía General de la Nación, materializó la captura en Medellín, gracias a la identificación de retratos hablados, a información suministrada por parte de la comunidad, y al trabajo articulado con una fuente humana de la Fuerza Aérea Colombiana.
“Lo que es claro, es que la responsabilidad de este atroz crimen y del atentado terrorista, es de las disidencias de las Farc, en cabeza de alias ‘Jhon Mechas’, cabecilla del frente 33 de esa estructura terrorista. Su célula terrorista es la responsable de siete de los últimos atentados terroristas con artefactos explosivos en Cúcuta”, aseguró Molano.
A través de la ‘Operación Dignidad’, la Policía Nacional capturó a otros cinco sujetos que habrían participado en la acción terrorista, luego de realizar un consejo de seguridad; de crear una ‘burbuja de inteligencia especial’, en la campaña militar y policial ‘Esparta’, y de ofrecer recompensa de $100 millones.
El Ministro de Defensa subrayó que los atentados son planeados y financiados en Venezuela, y perpetrados en Colombia. “En este caso particular, utilizaron un outsourcing con una banda criminal que estaba establecida en Medellín, aparentemente por previo contacto entre un miembro de las disidencias con uno de estos criminales de Medellín, que estaba en una cárcel en Cúcuta, y luego entrenados en Norte de Santander y en Venezuela para desarrollar esa actividad”.
“Se hospedaban en hoteles en Cúcuta y arrendaron casas en barrios cercanos al Aeropuerto Camilo Daza. Aquí hay una nueva modalidad de atentados terroristas”, manifestó el funcionario.
Molano aseguró que la información que se tiene es que los sujetos están divididos en varios grupos, lo cual es materia de investigación, para determinar la responsabilidad específica de los involucrados, en cuanto a la preparación de los explosivos, observaciones previas, incursión al interior del predio del aeropuerto y activación de los artefactos, que tenían como objetivo atentar contra la aeronave de la Fuerza Aérea Colombiana que estaba ubicada allí.
“Las disidencias de las Farc son unos cobardes. Alias ‘Jhon Mechas’, está haciendo sus actividades desde Venezuela, ni siquiera es capaz de venir a desarrollar acciones en Colombia, puro terrorista y cobarde. Ni siquiera utiliza a sus propios hombres, sino que tiene que subcontratar a otras manos criminales para atentar contra los colombianos. Son terroristas y cobardes”, concluyó.
A los capturados presentados por la Fiscalía se les atribuye haber viajado de Medellín a Cúcuta para definir la logística, y la preparación y activación de los artefactos explosivos.
“De toda esta cronología hay abundante evidencia técnica y material. Todos los movimientos de los hoy capturados tanto en Medellín como en Cúcuta están documentados. Hay videos de cámaras de seguridad, interceptaciones, elementos como prendas de vestir y rastros de los explosivos encontrados en los lugares donde estuvieron estas personas”, sostuvo el fiscal Francisco Barbosa.
Los detenidos, tres hombres y dos mujeres, ubicados en el corregimiento Santa Helena y en la ciudad de Medellín, en Antioquia, fueron identificados como Sebastián Moreno Maya, alias Sebas; y su compañera sentimental Nayibe Alexandra Londoño Carrillo; Adrián Kaled Guzmán, Yuly Mileidy Mazo y Diego Felipe Maya González.
La Fiscalía les imputó los delitos de: homicidio y tentativa de homicidio agravados; terrorismo; y fabricación, tráfico y porte de armas, municiones de uso restringido, de uso privativo de las Fuerzas Armadas o explosivos.
La investigación
Las investigaciones de la Fiscalía dan cuenta de que, entre octubre y noviembre, Cristian Camilo Muñoz Manjarrez, quien murió en la acción criminal; Diego Maya y Nayibe Londoño viajaron de Medellín a Cúcuta y, al parecer, se trasladaron a zona rural de Tibú (Norte de Santander), donde se habrían reunido con jefes de las disidencias del frente 33 de las FARC, se comprometieron a ejecutar el atentado y, supuestamente, recibieron instrucción en manejo de explosivos.
El 5 de diciembre último estas tres personas, junto a Sebastián Moreno Maya, Adrián Kaled Guzmán y Yuly Mileidy Mazo, volvieron a movilizarse de Medellín a Cúcuta, en un bus de servicio público en compañía con su hija menor de edad.
Los hoy procesados se hospedaron en un hotel del centro de la ciudad y en dos casas ubicadas cerca del aeropuerto. Asimismo, se constató que, presuntamente, usaron una carreta para simular que vendían refrescos y poder acercarse a la terminal aérea para hacer vigilancias.
La noche del 13 y la madrugada del 14 de diciembre, vestidos de negro, recorrieron en varias oportunidades las inmediaciones de la pista del aeropuerto. Pasadas las 5:00 a.m., dos hombres cruzaron la reja e ingresaron. A uno de ellos se le explotó un artefacto que llevaba en una maleta que cargaba en la espalda, y murió. El otro explosivo, compuesto por cerca de 30 kilogramos de pentolita, estalló luego ante la presencia de los técnicos antiexplosivos de la Policía Nacional.
También se conoció que, previó al ataque, contrataron a un hombre para que recogiera sus pertenencias y las botara.