Falleció compositor del himno de Floridablanca y Barrancabermeja
“La casa de la cultura Piedra del Sol quiere recordar los grandes aportes que dejó el compositor José Ortega entre los cuales se destacan ‘Memoria de la palabra’ de 1987, ‘Poemas breves’ de 1988, ‘Poesía santandereana’ de 1994, ‘El sendero iluminado’ de 1996, ‘Los laberintos del silencio’ de 1999, ‘El barquito de papel’ de 1999, entre otras importantes obras”, manifestó en un comunicado Dora Esperanza Álvarez, secretaria de dirección de la Casa de cultura la Piedra del Sol.
El compositor nació en Piedecuesta y fue bachiller del Colegio de Santander, Licenciado en Idiomas de la Universidad Industrial de Santander. Master en Educación, Investigación y Docencia Universitaria de la Universidad Santo Tomás de Aquino. Dentro de las más recientes publicaciones está: Sinfonía en el Crepúsculo - año 2001 (una aproximación a la poesía oriental y en especial al haiku japonés). El Soneto en Lengua Castellana - editorial sic – año 2003 y Los Ciruelos en Flor-año 2003.
Apartes del himno de Floridablanca, la ciudad dulce de Santander, data noviembre 4 de 1977, letra de José Ortega Moreno y música de Ramiro José Adarme Salazar. “Hay un pueblo de noble elegancia, levantado en un Valle sin par; es Florida en su blanca prestancia una raza arrogante y triunfal.” “Es la Piedra del Sol, nuestro emblema somos hijos de un bello esplendor; un pasado de gracia suprema que un artista aborigen trazó”. “En Ruitoque, meseta del viento, aún se escucha en tropel el rumor; de una estirpe de honor y portento, que a estas tierras su gloria les dio”. “Levantemos la frente, cantemos que la vida se vuelva un altar; si es preciso por siempre luchemos que es deber la victoria alcanzar”.
De esta manera, se refiere a la ciudad bella hija del sol, Barrancabermeja. “oh, Barrancabermeja, la egregia ciudad, bella hija del sol; en petróleo bañaron tu frente y un volcán se agiganta en tu voz. Pipatón fue el cacique guerrero que en la lucha el valor esculpió; y rompió las cadenas y el yugo del oscuro invasor español. Protegida del cielo, la luna, una diosa te quiso dejar; y Yarima surgió de las aguas en el gran Magdalena imperial. De la tierra el obrero aguerrido levantó con sudor el blasón; y en las torres al cielo querido el trabajo ofrendó con honor. Una patria forjemos ahora, una patria de fe y libertad; y estampemos tu enorme victoria con audacia sin par y lealtad”.
AUDIO Himno Floridablanca
