Dos trapiches paneleros ubicados en las veredas Portachuelo y Brasil en Riosucio, Caldas, fueron consumidos por las llamas en la madrugada de este sábado, afectando a 20 familias que tienen su sustento de esta actividad productiva.
Esta comunidad asentada en el Resguardo Indígena de Cañamomo y Lomaprieta al occidente de Caldas, denuncia que este año ya son cuatro las veredas afectadas por presuntos hechos delictivos, que pretenden afectar la tradición económica de ese territorio.
Así lo manifestó Kellerman Guerrero gobernador suplente del resguardo, al indicar que, “ya contamos con la presencia de la policía y la Sijin en la zona, para iniciar una investigación que permita dar con los responsables de estos incendios, que en el caso de uno de los trapiches, son 16 las familias que se ven perjudicadas”.
Agregó que el segundo trapiche es familiar, pero como comunidad, beneficia a quien lo necesite.
Foto Cortesía Resguardo Indígena Cañamomo
El líder indígena recordó que este año es la cuarta vez que ocurre un hecho similar, los dos anteriores ocurridos en las veredas Alto Sevilla y Cameguadua, que dejaron más de 50 familias afectadas que durante meses no pudieron procesar sus productos paneleros. Hace dos años tres trapiches más fueron incendiados y afectaron la economía de 70 familias.
“Hace dos años vivimos lo mismo en la vereda Portachuelo y Cameguadua, y desde eso se inició una investigación por parte de la administración municipal, la policía y nuestra guardia indígena pero no se ha obtenido algún resultado, por lo que tememos ocurra lo mismo, pues a esto se le suman las afectaciones por el invierno” expresó.
Y es que a propósito de la temporada de lluvias, en este mismo resguardo se tiene un aproximado de 30 familias que necesitan ser reubicadas, pues sus viviendas están en zonas de alto riesgo de deslizamiento, fenómeno que ha destruido por lo menos dos estructuras.