26 escenarios de riesgo se han registrado durante la segunda temporada de lluvias en el departamento del Magdalena, relacionados con inundaciones y deslizamientos por el fenómeno de crecientes súbitas y rompimiento de diques de contención afectando 11.342 viviendas de las cuales seis han sido completamente destruidas, según un informe entregado por la Oficina de Gestión del Riesgo.
“En estos momentos contamos con municipios dentro del departamento del Magdalena que se encuentran inundados. 63 sedes estudiantiles están inundadas hay afectaciones sobre el 86.79% de las vías terciarias del departamento”, dijo el Jefe de la Oficina de Gestión del Riesgo del Magdalena, Jaime Avendaño.
Uno de los problemas más complejos que están provocando las lluvias es sobre las vías y la dificultad de que campesinos puedan transportarse, tanto ellos como sus cosechas, hasta las cabeceras municipales desde los corregimientos y veredas para las comunidades.
“Se necesita el despliegue de un equipo de apoyo de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo y se apoye la problemática de vías porque esto condiciona el precio de los productos de la canasta básica familiar. Hoy, en municipios del Magdalena se consiguen huevos a 1.000 o libras de arroz a 6.000 o 7.000 pesos con una capacidad adquisitiva precaria. Además, para estos campesinos sacar sus productos hasta el casco urbano se ha convertido en una tarea imposible.” puntualizó Avendaño.
En la zona de Pivijay y en la parte media y alta de la Sierra Nevada se organizaron frentes de trabajo con maquinaria amarilla para habilitar el paso, pero esto ha sido suficiente, afirmó el Jefe de Gestión del Riesgo Departamental.
A través de esta oficina, puntualizó Avendaño que, se han entregado más 1.300 kits de ayudas humanitarias a familias que han sido afectadas y, por medio de gestiones realizadas ante la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, se brindaron 5 mil ayudas más. También se han llevado 400 colchonetas, 1.200 hamacas, frazadas y elementos básicos de aseo y cocina.
Según el funcionario, por lo menos 11.000 familias han sufrido algún tipo de afectación por el invierno en el departamento, por lo que solicitaron ayuda al gobierno nacional debido a que la cifra sobrepasa la capacidad de atención.