Más de 800 hectáreas de la Sierra han sido afectadas por el incendio forestal de los últimos días. Los indígenas han declarado estado de emergencia y han precisado que en uno de los sectores el incendio consumió la totalidad de las casas de propiedad colectiva y de uso comunitario.
Aseguran, además, que estas casas son irrecuperables porque contenían un sin número de elementos culturales, espirituales y religiosos, todos imposibles de replicar. La comunidad Arhuaca ha estado reunida con diferentes organismos encargados de las operaciones de atención de emergencias y desastres para buscar una pronta solución a este problema que a cada minuto se torna más alarmante.
Conversamos en La Señal de la Mañana con Leonor Zalabata, lideresa indígena de la comunidad arhuaca y defensora de derechos humanos, habitante de la Sierra Nevada de Santa Marta, sobre la situación:
“La Sierra Nevada de Santa Marta ha tenido este accidente en varios puntos a causa del calentamiento global y las direcciones de los vientos. La zona ambiental del resguardo arhuaco es afectada desde hace mucho tiempo por la salinización del aire en La Guajira, porque cualquier aumento en los grados de calor representa un alto riesgo para el ambiente y por consiguiente para la vida de los pueblos y sus tradiciones”
Sobre el incidente del pasado domingo 24 de febrero, puntalizó:
“Tuvimos este incidente el domingo; se generó un fuerte incendio y desaparecieron muchas viviendas además de una escuela y sus aulas de clase, un puesto de salud, el despacho de la autoridad local, la casa de reflexión, la casa de herramientas, la batería sanitaria, la vivienda de profesores, la casa de reuniones comunitarias y la cocina”
Sobre los efectos culturales de la destrucción de los bienes que se consideran muy difíciles de recuperar, Zalabata reflexionó lo siguiente:
“Para nosotros el tema está ligado realmente a una cuestión ambiental, está ligado a las tierras y a la presencia de una naturaleza viva. Lo que se está acabando es la naturaleza, y no a partir de este incendio, sino a falta de unas políticas públicas claras, en donde el hacinamiento poblacional disminuya, en donde las políticas de protección para conservación sean sólidas. No podemos seguir pensando en minería ni en represas, tenemos que pensar en el cuidado de la naturaleza, de lo contrario estos incidentes naturales van a ser cada vez más graves. Y no es solo una cuestión de intenciones en palabra de parte del Gobierno, sino de la implementación de esas intenciones convertidas en obras y hechos.”
Cuenta la lideresa indígena que desde el domingo pasado las comunidades afectadas por los incendios ni siquiera han podido dormir porque están demasiado ocupadas tratando de apagar el fuego. Según ella, no ha sido suficiente contar con arroyos para mitigar las llamas, y si bien hay una gran responsabilidad ambiental por parte del Gobierno, también es importante decir que no todas las comunidades indígenas que habitan la Sierra se han movilizado al respecto:
“Las ayudas que nosotros estamos solicitando son para poder realizar trabajos colectivos. Habrá que llevar ayuda humanitaria a familias y personas, pero nosotros necesitamos apoyo en alimentos y herramientas que realmente sean útiles; no queremos tantas cosas de plástico sino utensilios reutilizables que sirvan para la cocina colectiva. En este momento es indispensable un fortalecimiento real en la labor comunitaria”.
Escuche aquí la entrevista con Leonor Zalabata en La Señal de la Mañana de Radio Nacional de Colombia: