Sesenta familias víctimas del conflicto armado en Neiva recibieron ayudas, consistentes en equipos, muebles e insumos, para fortalecer emprendimientos propios y pequeños negocios con los cuales avanzan en su reparación económica.
Este apoyo permite mejorar las actividades comerciales que realizan las familias, e incluye herramientas para talleres de mecánica y confección, elementos para dotar panaderías, heladerías, tiendas y restaurantes, mejorar el servicio en salas de belleza y hasta pollitos y alimento para estos animales de cría, confirmó Leonardo Barrios, coordinador de la Oficina de Atención a Víctimas del Huila.
También se entregaron fertilizantes y otros insumos para la producción agropecuaria, que incorpora a cultivos de café, cacao y frutas tropicales.
“En total en el departamento hemos brindado apoyo a 842 familias que han sido identificadas y que ya tienen una trayectoria con esos emprendimientos”, explicó Barrios. Agregó que los elementos que se entregan permiten fortalecer esa actividad, que se vio muy golpeada por la pandemia.
Lee acá:
“Solo en Neiva hemos entregado ayudas para 60 familias víctimas del conflicto armado, tanto de la zona urbana como rural, que requerían de este respaldo para la generación de ingresos y poder superar esas condiciones de vulnerabilidad”, indicó el funcionario.
El coordinador de la Oficina de Atención a Víctimas del Huila recordó que una de las dificultades más grandes que enfrentan las familias, como en cualquier otro negocio, es poder alcanzar un punto de equilibrio financiero y superar su primer año de existencia, por lo que también se brinda otro tipo de apoyo, como capacitación en administración de negocios y acompañamiento psicosocial.
Precisó que la definición sobre las necesidades de cada familia se adopta de manera conjunta entre las instituciones que participan en el proceso y una visita técnica a los pequeños emprendimientos.
“Era fundamental conocer en qué condiciones se encontraba cada unidad productiva, para determinar en primera instancia si aún existían y qué tipo de apoyo necesitaban”, subrayó el funcionario.
Te puede interesar:
En el proceso, comentó, participaron también de manera concertada las Alcaldías y las mesas locales de atención a víctimas del conflicto armado y la Mesa departamental, “para determinar con cada uno de los sectores que conocen la realidad puntual de las familias en cada uno de los municipios, y determinar además que las unidades productivas sigan operando”, añadió Barrios.
La entrega la hicieron de manera oficial autoridades locales y la Gobernación del Huila, junto a la Fundación del Alto Magdalena y una compañía petrolera que opera en el departamento.
De acuerdo con cifras oficiales, el Huila tiene un registro de más de 200 mil personas que han sido víctimas del conflicto armado.