Una investigación forense, realizada por Forensic Architecture, concluyó que el disparo que acabó con la vida de Dilan Cruz, durante las manifestaciones de 2019, fue deliberado, lo cual contradice el informe técnico presentado por la Fiscalía sobre el crimen.
De acuerdo con los investigadores, el agente del ESMAD Manuel Cubillos apuntó y disparó directamente a la cabeza de Cruz y no le impactó por error al disparar indiscriminadamente contra los manifestantes, como lo asegura la investigación oficial.
El estudio fue hecho con base en técnicas de análisis espacial y videográfico y llega a cinco conclusiones:
- Dilan fue el objeto del disparo. "La reconstrucción espacio-temporal de la evidencia visual realizada por Forensic Architecture, permite asegurar que el disparo de Manuel Cubillos iba dirigido a Dilan Cruz y no contra una supuesta turba, la cual estaba en una ubicación distinta a la línea de tiro del disparo", afirmó la organización en un comunicado.
- Manuel Cubillos apuntó a Cruz. Según el estudio, el agente del ESMAD alineó su arma con él joven de 18 años, siguió sus movimientos durante cuatro pasos, y disparó.
- Análisis de la Fiscalía fue inconsistente e inexacto. Según Forensic Architecture, aunque la entidad afirmó haber realizado un análisis espacio-temporal detallado, basado en un levantamiento digital tridimensional de la escena del crimen, su análisis se limitó a una serie de diagramas bidimensionales y
capturas de pantalla, que no permitían concluir que los manifestantes en su conjunto fueran el objetivo del disparo.
- Dilan no era una amenaza para los agentes del ESMAD. Según el estudio forense, aunque él devolvió los gases lacrimógenos a los Policía su fuerza no puede compararse con la que tienen las armas con las que los agentes los dispararon. Al lanzarlos de vuelta, los gases cayeron a 27 metros de distancia de la policía.
- No había equiparación de fuerzas entre Dilan y los agentes del ESMAD.
El estudio de Forensic Architecture fue hecho a petición de la organización de Derechos Humanos que
representa a la familia de Dilan, el Comité de Solidaridad con Presos Políticos, como contraanálisis del informe técnico presentado por la Fiscalía.
Casi cuatro años después de ocurrida la muerte de Dilan, el proceso sigue con muy pocos avances, pues se dilató por los conflictos de competencia que se presentaron sobre quién debería asumir la investigación, que, finalmente, quedó a cargo de la justicia ordinaria.